ES – Experiencia de Andres y sus progresos – Testimonios

La primera vez que nos encontramos con la kinesioterapeuta del método Dévény fue en Agosto del 2014. Andres tenía 32 meses y presentaba hipotonicidad del tronco, con los reflejos óseo-tendinosos  reactivos. Sentado algunos segundos, comenzaba a caerse. Sus manos estaban cerradas pero móviles, su cabeza hacia atrás e inclinada hacia su izquierda. Sus piernas en extensión con las rodillas encorvadas y sus pies en apoyo valgus (dirigido hacia adentro), sentía mucho miedo y vértigo a los movimientos de su cuerpo y al vacio (sensación de caerse).

Se ahogaba cada vez que comía y bebía. Su mirada a veces perdida se concentraba sobre un solo punto. Nuestro hijo no evolucionaba, su retardo era cada vez más importante y visible.

Viendo los primeros resultados de manera inmediata después del primer encuentro con la fisioterapeuta del método Dévény, comenzamos a viajar a Budapest (Hungría) durante todas las vacaciones escolares.

Actualmente, vamos una semana al mes y 2 semanas durante las vacaciones escolares. Desde 1h por día al principio hasta 2h de trabajo algunos días.
La kinesioterapeuta comenzó a trabajar primero el cuello y la espalda de Andres,  desde la columna vertebral para descender luego a sus caderas, piernas, pies  y también a sus brazos, manos y dedos. Trabajó también con su rostro, boca, orejas, ojos, tráquea y vientre.

Andrés adquirió flexibilidad en sus movimientos, aprendió a enderesarse, levantar y dirigir su cabeza derecha, abrir sus manos y dedos para manipular objetos.  Fueron tratados los trastornos de la mandíbula, lengua y tráquea, comenzó a abrir grandemente su boca, beber y comer sin ahogarse ni atorarse. Una vez sus pies y rodillas enderezados, comenzó a ponerse de pie para efectuar sus primeros pasos. Perdió el miedo y mejoró su equilibrio gracias al trabajo realizado a nivel de sus oidos. El trabajo sobre los músculos, tendones y nervios le permitió mejorar significativamente su crecimiento (aun insuficiente para su edad) y eliminar su dolor de piernas y pies, así como la prescripción del botox terapéutico.

Todos estos progresos, observados claramente durante los períodos intensivos de la práctica Dévény, fueron complementados en Francia con el siguiente  programa de sesiones destinadas a la adquisición de movimientos:

2 sesiones de kinesioterapia por semana,  desde hace 2 años una sesión semanal de equino- terapia, este año se agregó una sesión de ergoterapia semanal y a una de psicomotricidad cada 15 días.

Andres es actualmente un niño inteligente, que habla muy bien, con un buen nivel de comprensión para su edad. Continúa su tratamiento con el método Dévény el cual rectifica sus músculos atrofiados para evitar la deformación de su columna y del resto de su cuerpo. Necesitará seguir con el método durante todo su crecimiento.

Andres estaba condenado a desplazarse en silla de ruedas o con aparatos ortopédicos y a ser asistido en todos sus actos.

No obstante, camina sin férulas, solo dándole la mano a alguien en el momento de efectuar ciertos movimientos y mantener su equilibrio.

Actualmente, va a la escuela, juega con sus compañeros en el patio, aprende a escribir, come solo, y habla correctamente.

 

A fuerza de múltiples sesiones y de mucha perseverancia, este método ha permitido finalmente a Andres de realizar movimientos que hasta el momento de comenzar  este método eran imposibles.

Le ayudó a aprender a manipular, hablar, comer sin ahogarse, caminar, reforzar sus músculos…… y a vivir feliz!!